Mi reino por un portátil

Hace aproximadamente un mes me empezó a fallar el equipo con el que habitualmente trabajo, el Macbook Air. Llevaba ya algún tiempo dando advertencias de batería pero ya me había acostumbrado a que la duración no fuera la óptima.

De la noche a la mañana dejó de cargar, el Magsafe no se encendía sin embargo con él enchufado la batería parecía mantener la carga, muy raro todo. Lo primero que pensé fue que la batería había pasado a mejor vida así que encargué una batería nueva y mientras no llegaba tuve cuidado de tenerlo casi siempre enchufado para no quedarme sin ella (estos equipos llegado al 10% se ponen en "modo Fernando Alonso" y no hay quien trabaje en ellos).

La siguiente sorpresa fue con la batería nueva, el comportamiento era idéntico al que tenía con la antigua, así que descartamos esa hipótesis -aunque si al final se arregla me vendrá bien contar con una nueva- y dejamos que los profesionales del hardware hagan su trabajo.

Días después se confirma que el problema es de un chip de administración de energía soldado en placa (INTERSIL ISL6259AHRTZ) nada demasiado complicado si se sabe lo que se hace pero hay que esperar aproximadamente un mes por la pieza, a China.

El único inconveniente es no iba a estar preparado para un viaje de trabajo que ya había planeado así que habría que buscar un sustituto. Mi primera idea era cambiar el Macbook Air por un Macbook Pro pero empezaron a picarme todos los venenos de la manzana:

  • Baterías complicadas de sustituir.
  • Complementos exclusivos y excesivamente caros.
  • RAM soldada en placa.
  • Procesadores obsoletos (todavía no montan Intel de 6ª generación).
  • En "no Apple", por el mismo precio consigues un portátil con el doble de specs.

Eso unido a los rumores que apuntaban a un nuevo Macbook en la última keynote del 21 de Marzo me hizo tirar de paciencia para esperar un poco más. Pero la presentación de los ansiados nuevos Macbook Pro no se produjo y el tiempo corría en contra.

Tenía claro que de no ser Apple quería un Thinkpad, ¿por qué?, no lo sé, imagino que por amigos, referencias, soporte Linux, tienen aparatos de 13 y 14 pulgadas (más es insufrible para mí)... demonios, la serie X es realmente chula y después de todo me apetecía probar algo fuera de OSX. Pero por otro lado tampoco quería gastar demasiado porque, a fin de cuentas, es una solución temporal puesto que el Macbook Air no llegaría para el viaje pero sí para después, así que me conformé con algo intermedio: Thinkpad L450.

Pedirlo en la web oficial "a medida" no me garantizaba que llegaría a tiempo así que tuve que optar por una configuración "por defecto" de 600€. En dos días lo tenía en casa. La primera impresión fue, ni realmente buena, ni mala del todo. Un 14", más o menos lo esperado en dos dimensiones pero el "alto" lo mata, muy tocho en comparación tanto con el Air -normal que sea más alto- como con el Macbook Pro, es prácticamente el doble de alto.

Instalé la última Linux Mint 17.3 Rose Cinnamon 64-bit y en principio todo funcionó a la primera, gráfica, touchpad, wifi, ethernet, bluetooth... lo peor ha sido el tiempo que pasé configurando el entorno y esa sensación de "volver" a pasar tiempo con problemas no demasiado importantes (shortcuts, fuentes, colores...) hasta dejarlo todo al gusto. O casi.

Y hasta ahí las "buenas noticias". Dejando el tamaño a un lado -sic-, la primera vez que lo hiberné no fue capaz de despertarse, pensé que podría ser un hecho aislado así que no le dí más importancia. Ya se ha repetido un par de veces más. Por otro lado no he sido capaz de hacer funcionar la webcam, lo cual no me preocuparía de no ser por el viaje y que me apetece ver a la familia. La batería está bien (4 horas aproximadamente trabajando con wifi) sin llegar a ser nada del otro mundo si lo comparamos con Apple. En los pocos días que llevo con él no he sido capaz de acosbumbrarme ni al teclado ni al touchpad, demasiadas diferencias tanto en disposición como en el funcionamiento -del touchpad sobre todo- no sabría decir si es cuestión de configuración, ajustes de sensibilidad, presión o que realmente la diferencia es grande. Y por último la pantalla, con la misma resolución del Macbook Air, tanto la nitidez como el brillo de la misma no se le acerca ni de lejos, trabajando varias horas en él aparto la vista y la noto distinta, sin embargo conectado a monitor externo todas esas diferencias se disipan.

He ganado en algunos puntos, uso software libre, la carga de cpu es sensiblemente inferior a la de OSX, puedo ampliarlo económicamente y los repuestos en caso de avería son infinitamente más baratos... pero mi cabeza sigue pensando que he palmado 600€ en vez de haber ganado un portátil con Linux. Y lo peor de todo es que no puedo hacer mucho más que conformarme con esta situación.

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Óscar
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