Marshmallow: humilde minireview

Marshmallow es la nueva y brillante versión de Android 6.0. Y como buen early adopter no he querido esperar a la OTA oficial para cambiar el sabor del Nexus5 así que me puse al lío, wipe incluído, para saborear desde cero los malvaviscos de la gran G.

Sabía de antemano que la batería de mi móvil no estaba en buen estado, no la cuido demasiado, prefiero tener el móvil con carga que esperar a que se acabe así que la cargo cuando lo veo conveniente, nada de esperar a los ciclos completos ni tener en cuenta los biorritmos del IonLitio; la cargo y punto, un teléfono es para usarlo.

Apenas llegaba a la hora y media de uso de pantalla entre carga y carga, o hablando en términos más generales, apenas un día. Teniendo en cuenta que no tengo instalada la app de Facebook, es muy poco. Sin embargo desde la instalación de Marshmallow el uso de pantalla ha aumentado a poco más de 2 horas y el teléfono pasa el día sobrado sin cargarse, por lo que el rendimiento de la batería ha aumentado notablemente.

En las gráficas se ve claramente que cuando el dispositivo permanece inactivo el nivel de batería apenas baja, se nota que el nuevo sistema Doze está haciendo de las suyas cuando el terminal no se está usando activamente, +1 para Marshmallow.

Otro punto positivo para los malvaviscos es que en experiencia de usuario el teléfono parece que vuela, han desaparecido esos pequeños retardos entre animaciones, cambios de menús etc... todo funciona más fluido, como cuando instalas más RAM - o un SSD - en un equipo sobremesa, pero conservando el mismo hardware.

El único inconveniente que me he encontrado hasta la fecha - quitando el lío de volver a instalar/configurar todo el software - ha sido con SwiftKey y los DPI. Una de las primeras personalizaciones que le hago al teléfono es cambiar la resolución, esta vez lo he hecho sin root (adb shell wm density) y SwiftKey se ha vuelto loco en su última actualización, así que como no soportan custom DPIs, me ha tocado bajar versión y esperar a que se arregle (si es que alguna vez les da por ahí). He intentado usar Google Keyboard, pero es imposible, me he dado cuenta que estoy demasiado acostumbrado a SwiftKey.

A raíz de lo anterior también he notado que sin root es más complicado congelar una aplicación para no instalar automáticamente las actualizaciones, así que ajo y agua.

Creo que, por el momento, el tema de la batería pesa bastante más que el pequeño inconveniente del teclado. En definitiva, que si tienes un Nexus y la posibilidad de actualizar a Marshmallow, ni lo pienses, parecerá que has cambiado de terminal.

About the author

Óscar
has doubledaddy super powers, father of Hugo and Nico, husband of Marta, *nix user, Djangonaut and open source passionate.
blog comments powered by Disqus