Era visto, como cualquier nuevo famoso o nuevo rico que ha ganado un bombazo (entiéndase como quiera) al Firefox le han salido algunos granos en el trasero. ¿Preocupante?, gracioso diría yo.
Ahora resulta que ya no es la panacea, tiene numerosos fallos de seguridad que lo ponen en peligro, le salen clones y hermanos pequeños por doquier y sus políticas de uso no son las adecuadas para La Comunidad.
Cómo cambia la opinión de la gente por unos puñeteros logos.
debian